Transformar la vida de madres adolescentes para reducir la inequidad

A los 15 años, mientras cursaba noveno, María Alejandra Arteaga Restrepo quedó embarazada. En camino venía Emiliano, su hijo, a quien cuida desde entonces con el apoyo de sus padres. Una vez supo y decidió continuar con su embarazo, las preguntas acerca de su futuro llegaron en cascada y se enfrentó, además, al estigma del embarazo adolescente. Muchas veces pensó no regresar al colegio para evitar escuchar las críticas.  

Solo tenía una idea clara: «sacar adelante a Emiliano», pero ¿cómo? Pensó en que lo primero era trabajar para darle comida y estudio. En ese momento el desarollo de ella como individuo pasó a un segundo plano. Mientras eso sucedía llegó a su colegio la convocatoria de la Fundación Juanfe para acompañar a madres adolescentes con un modelo de atención 360°, que tiene como uno de sus objetivos prevenir un segundo embarazo.  

La Juanfe transforma la vida de las madres adolescentes y su núcleo familiar desde cuatro componentes: el ser, en el que se hace una intervención psicosocial durante dos años; salud integral, donde promueven la salud sexual y reproductiva y, además, les enseñan a reconocer sus derechos y procurar su bienestar; técnica laboral, en donde se forman para luego insertarse de forma exitosa en el mercado laboral y, finalmente, acceden a un acompañamiento en el proceso de adaptación laboral.  

Por eso, cuando María Alejandra se enteró de que la Juanfe llegaba a Medellín y se dio cuenta de todo lo que ofrecían, no lo podía creer, «¿esto tan bueno si será cierto?», se preguntó. La llegada a la Fundación Juanfe a su vida, encendió una llama interna que le permitió desde entonces retomar su propio proyecto de vida y fijarse nuevas metas, por lejanas que parecieran.  

Después de este proceso, María Alejandra tuvo un excelente desempeño en la práctica laboral y fue asistente administrativa durante dos años, luego pasó a otra empresa a trabajar como auxiliar administrativa y, en muy poco tiempo, logró ascender a líder de talento y tener un equipo de 40 personas a cargo.  

La vida de Alejandra es el ejemplo de lo que puede lograr darle la vuelta a las estadísticas que vinculan el embarazo adolescente con los círculos de pobreza y acompañar a las mujeres para que puedan alcanzar sus sueños, seguir con su vida y sus proyectos vitales. Más de 7.000 mujeres han evidenciado cómo sus vidas se transforman, cómo sus metas se hacen realidad progresivamente, con el apoyo suficiente y las puertas que se abren a un mundo lleno de oportunidades de crecimiento personal y profesional.  

En agosto de 2019, recibió el premio IconicCompaniesCreating a BetterWorldforAll en el WomenEconomicForum Latinoamérica y, en 2021, Catalina Escobar, su fundadora y presidenta, fue galardonada con el Premio Mapfre al mejor proyecto social por el Modelo 360º de desarrollo social.  

ABC de esta solución

1. Acompañar a las madres adolescentes para que construyan un proyecto de vida individual.

2. Garantizar acompañamiento psicológico para afrontar de manera adecuada esta nueva etapa. 

3. Prevenir el embarazo subsecuente en las jóvenes madres, con acceso a educación sexual y reproductiva.

4. Ofrecer formación técnica que las cualifique para acceder a su primer empleo formal.

5. Acercar a las madres jóvenes oportunidades para el empleo formal y acompañarlas en el proceso de adaptación laboral.

6. Involucrar al núcleo familiar en el proceso para garantizar la construcción de una red de apoyo sólida.