¿Arrendar o comprar vivienda?

Andrés Cartagena y Diana Zamorano decidieron formar una familia. Solamente ellos dos, sin hijos. Ese proyecto incluía un sueño: tener una casa propia en el campo; algún día querían poder huir del caos y de la contaminación de la ciudad.

En el 2012 emprendieron la búsqueda, pero tenían más preguntas que respuestas. Mientras tanteaban por dónde empezar, escucharon que en Comfama podrían orientarlos para cumplir su propósito.

«¿Cómo se imaginan su casa?» les preguntaron en una asesoría de subsidio de vivienda. Ellos realmente no lo tenían claro con todo detalle, aun así, en ese instante tuvieron la extraña pero satisfactoria sensación de que podrían llegar a tenerla.

A partir de ese día, en el comedor del apartamento, durante muchas noches y fines de semana en familia los Cartagena Zamorano dibujaban los planos de la casa de sus sueños y hacían listas de lo que sí o sí les gustaría que tuviera, por ejemplo: corredores amplios, muchas alcobas y espacios para compartir.

Sin embargo, en las asesorías notaron varios inconvenientes: había procesos para la solicitud del subsidio que no eran fáciles de entender, documentos que debían solicitar nuevamente o de cero. Pero más importante que eso: la casa que soñaban no encajaba en sus posibilidades presupuestales.

Debían conversar más, ya no de lo que soñaban, sino de lo que podían pagar, de lo que estaban dispuestos a renunciar y de lo que, por ningún motivo podía faltar en su vivienda.

Casi no se ponen de acuerdo en algunas renuncias, como la de tener corredores amplios; en cambio, entre los dos llegaron a la conclusión de que sí querían tener un pequeño deck que les permitiera disfrutar el aire libre.

También hablaron acerca de los sacrificios que estaban dispuestos a hacer para poder pagar. Si bien el subsidio significaba para ellos una ayuda grande, tuvieron que enfocarse en ahorrar, ajustarse en gastos y renunciaron a muchas salidas los fines de semana y paseos para lograrlo.

10 años de conversaciones y preguntas en familia fueron necesarias para poder cumplir con las etapas que implicó llegar a la meta, para ser capaces de soñar, para hacer sacrificios y para construir ese futuro que ya es presente en Marinilla.

Los Cartagena Zamorano encuentran en su propia huerta el espacio para cultivar, cosechar y compartir con la naturaleza. Además, creen en la posibilidad de soñar, planear y lograr cosas en familia cuando todos participan.

¿Comprar vivienda?

Guía de preguntas para conversar en familia. Estas son algunas preguntas, diseñadas junto al equipo de Hábitat de Comfama, para hacerse antes de recorrer la ruta hacia una vivienda propia.

1. ¿Para qué queremos tener una vivienda propia?

a) Para vivir en ella.

b) Para invertir y tener ingresos extra.

2. ¿Sentimos que la compra de una vivienda es la mejor decisión para nuestra familia en este momento?

a) Sí, estamos seguros de que es lo correcto.

b) No, tenemos algunas dudas que debemos resolver.

c) No estamos seguros, necesitamos más tiempo para pensarlo.

3. ¿Qué consecuencias trae la compra de vivienda para nuestro estilo de vida?

a) Vamos a adquirir más responsabilidades.

b) Tendremos más espacio y libertad.

c) Revisaremos qué cambios trae para nuestro estilo de vida.

4. ¿Dónde queremos vivir?

a) Cerca del trabajo o el colegio, en un lugar tranquilo y seguro.

b) Una zona con acceso a muchos servicios y comercios.

c) No estamos seguros, debemos investigar más.

5. ¿Qué tamaño de vivienda necesitamos?

a) Una vivienda pequeña, solo somos dos.

b) Una vivienda más grande para una familia o espacio para invitados.

c) No estamos seguros, depende de nuestro presupuesto.

6. ¿Tenemos suficiente capacidad económica para adquirir la vivienda?

a) Sí, tenemos ahorros y estabilidad financiera.

b) No, pero podemos solicitar un préstamo y revisar subsidios a los que podamos aplicar.

c) No estamos seguros, debemos revisar nuestras finanzas.

¿Quieres saber más? En Comfama te acompañamos a la hora de adquirir o mejorar tu vivienda, con un modelo de hábitat que busca la calidad espacial, la accesibilidad financiera y la sostenibilidad social y ambiental. Descúbrelo aquí